La aparición de un bebé desnudo y solo a las puertas de la aldea de Pelt, durante uno de los inviernos más fríos que se recordaban, revoluciona la vida de los parroquianos.
Las familias ricas del lugar se niegan a acogerle, mientras el resto de los habitantes del lugar no se pueden permitir compartir la escasa comida de la que disponen.
Ante esta situación, y para evitarle una muerte segura, Berdon, el herrero, decide hacerse cargo del pequeño y criarle, él solo. En su compañía, el pequeño Fletcher crece hasta convertirse en un joven que divide su tiempo entre la herrería y las incursiones de caza en el bosque, para conseguir algo de carne fresca.
El carácter reservado de Fletcher, unido a sus inciertos orígenes, le convierten en un muchacho sin demasiados amigos y con algunos enemigos. Sobre todo, Didric Cavell, hijo del hombre más rico y poderoso del lugar, que disfruta complicando la vida al muchacho.
La llegada de un soldado desde la frontera con los Orcos, con los que los hombres llevaban años peleando, acerca a su mundo una realidad que Fletcher creía lejana, la guerra.
Gracias al soldado, el joven descubre la situación real en la que se encuentran las tropas del rey, los magos de batalla poco pueden hacer contra el poder de los magos Orcos, capaces de invocar demonios poderosos a los que controlaban con sus poderes, sembrando la muerte y la destrucción entre las filas de hombres.
Antes de partir, el soldado le regala a Fletcher, en agradecimiento a su hospitalidad, el libro de un mago de batalla. Entre sus páginas, el muchacho descubre el conjuro necesario para invocar a un demonio.
Sabedor de que tan solo los descendientes de la nobleza y algunos plebeyos tienen la capacidad de invocar y controlar a los demonios, decide alejarse de la aldea y probar suerte con el conjuro.
Asombrado, el muchacho descubre, tras leer las palabras impresas en el papel, a un demonio a su lado dispuesto a obedecerle.
Sin tiempo para asimilar su nueva realidad, Fletcher debe abandonar la aldea tras herir a Didric Cavell, cuando éste y sus secuaces le atacan con intención de matarle.
Tras despedirse de Berdon, solo y sin familia o amigos a los que recurrir, el muchacho decide alejarse lo más posible de los lugares que formaron parte de su infancia.
Después de quince días de viaje, Fletcher llega a Corcillum donde conoce a un oficial del ejército, Arcturus. Gracias a él conseguirá ingresar en la Academia Vocans, lugar los magos de batalla reciben formación militar y aprenden a controlar las artes de la magia.
La Academia Vocans, lugar exclusivo y de difícil ingreso, abre sus instalaciones para acoger a los magos procedentes de las clases nobles y a los plebeyos dotados del mismo poder.
Una nueva vida para Fletcher, en la que tendrá que esforzarse por aprender, lo más rápido posible, a controlar a su demonio mientras descubre entre algunos de sus compañeros a los amigos que jamás tuvo. A su lado deberá pelear por un futuro que los nobles tratan de impedirle, y que le llevará a la frontera donde hombres y Orcos luchan sin descanso.
La leyenda del hechicero, muestra el viaje iniciático de su protagonista, marcado por el desarraigo familiar. Un personaje solitario que busca en su grupo de amigos el apoyo necesario para enfrentarse a su proceso de aprendizaje y maduración. Aspecto que seguro logrará que el público juvenil se sienta identificado con sus sentimientos y su forma de actuar.
Bien narrada y estructurada, centra el interés en la acción por encima de las descripciones, que son muy escuetas, tanto de los ambientes como de los personajes.
Primera parte de una saga, deja el final en un punto álgido de la historia para enganchar a los lectores en su continuación.
La presencia de enanos, elfos y orcos, obligan al lector a pensar en libros similares como puede ser el Señor de los anillos, aunque de lectura más ligera.
Una historia que me recordó, quizás por el detalle de los demonios, a la trilogía de Philip Pullman La Materia Oscura en la que aparecían los daimonion, una manifestación de la esencia del humano que los poseía y que formaban una parte inseparable durante toda su vida.
Recomendable para un público juvenil aficionado a novelas en las que la aventura y la magia van unidas.
El autor de La leyenda del hechicero. Taran Matharu. nació en Londres en 1990. Su primer libro lo escribió con tan solo 9 años. Tras graduarse en Administración de Empresas, comenzó a trabajar en el departamento de ventas online de la editorial Penguin Random House, desde junio a septiembre de 2013. Con 22 años escribió The Summoner (en castellano traducida como La leyenda del Hechicero) en un proyecto de escritura online denominado Nanowrimo 2013, logrando que, en tres meses, su primer volumen, alcanzase más de tres millones de lecturas.
PLANETA
Temática: Juvenil a partir de 12 años.
Fantasía/ciencia ficción.
Colección: Planeta Internacional
ISBN: 978-84-08-14597-4
496 Páginas
Disponible en digital.
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